Hace mucho que no enseñamos los ramos de nuestras novias, así que hoy empezamos con el de Esther, que se casó a finales del mes de marzo.
Esther no iba a llevar un vestido de novia tradicional, así que buscaba también un ramo más personal y con un punto de sofisticación. En cuanto le enseñamos las rosas de pitiminí"Splash Sensation", se enamoró de ellas, ¡y no nos extraña! Con ese tono rosa viejo es una de las favoritas de las novias.
Como su vestido era de una tela con matices dorados, le sugerimos incluir en su ramo de novia, brunia y eucalipto también en ese tono para conseguir darle el toque diferente que ella buscaba. ¡Además este año los detalles metálicos son tendencia!
Para cubrir la empuñadura, utilizamos parte del encaje rústico que llevaba su vestido. Siempre preguntamos a las novias si pueden conseguir algún retal de la tela de su vestido con el que poder cubrir los tallos de las flores. Es un detalle que nos gusta mucho para terminar de vestir el ramo.
Y como no podían faltar, los prendidos para el novio y el padrino a juego con el ramo. Rosas de pitiminí blancas, que nunca fallan, y brunia dorada para un resultado elegante.
Esther no iba a llevar un vestido de novia tradicional, así que buscaba también un ramo más personal y con un punto de sofisticación. En cuanto le enseñamos las rosas de pitiminí"Splash Sensation", se enamoró de ellas, ¡y no nos extraña! Con ese tono rosa viejo es una de las favoritas de las novias.
Como su vestido era de una tela con matices dorados, le sugerimos incluir en su ramo de novia, brunia y eucalipto también en ese tono para conseguir darle el toque diferente que ella buscaba. ¡Además este año los detalles metálicos son tendencia!
Para cubrir la empuñadura, utilizamos parte del encaje rústico que llevaba su vestido. Siempre preguntamos a las novias si pueden conseguir algún retal de la tela de su vestido con el que poder cubrir los tallos de las flores. Es un detalle que nos gusta mucho para terminar de vestir el ramo.
Y como no podían faltar, los prendidos para el novio y el padrino a juego con el ramo. Rosas de pitiminí blancas, que nunca fallan, y brunia dorada para un resultado elegante.
